Investigaciones recientes del Consejo Universitario del Agua de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP) han identificado la presencia de flúor y arsénico en el agua distribuida en varios municipios del altiplano potosino, incluyendo Villa de Ramos y Santo Domingo. La doctora María Catalina Alfaro de la Torre, integrante del consejo y profesora investigadora de la Facultad de Ciencias Químicas de la UASLP, destacó que la exposición prolongada a estos contaminantes puede ocasionar graves daños a la salud.
La doctora Alfaro de la Torre enfatizó que este problema es de alcance estatal, afectando a diversas comunidades en el Altiplano. Señaló que la calidad del agua distribuida no es óptima y que, a nivel nacional, menos del 43 % de la población recibe agua proveniente de una planta potabilizadora.
La presencia de flúor y arsénico en el agua potable es motivo de preocupación debido a sus efectos nocivos en la salud. El consumo prolongado de arsénico puede provocar enfermedades como el cáncer de piel, pulmón y vejiga, mientras que niveles elevados de flúor están asociados con fluorosis dental y esquelética, afectando la estructura ósea y dental de las personas.